Jóvenes y medios
¿Cuál es la influencia de la tecnología en la juventud actual? Internet y las nuevas tecnologías revolucionaron nuestra vida, impactando en nuestras relaciones interpersonales, la información que consumimos y la forma en la que nos comunicamos. Sin duda, los jóvenes, nativos digitales, son los mas influenciados por esta revolución tecnológica.
El significado de ser joven se ve siempre distorsionado por aspectos culturales, biológicos o sociales, y más aún en la actualidad. Podemos pensar, generalizando, que la juventud es un proceso de transformación donde aún se pueden postergar “obligaciones” o “normativas” como el matrimonio o el trabajo.
Esta etapa se caracteriza por consumos culturales como salir a bailar, juntarse a charlar en una plaza o navegar por internet. Estas actividades de esparcimiento son condicionantes de la formación de la identidad de los jóvenes, ya que desde ellas parte la creación de estereotipos que sirven como parámetro y modelo de comparación entre estos grupos. Así, el lado negativo de lo que podemos llamar la juventud del siglo XXI, es lo inmersa que se encuentra en las redes de información y comunicación, donde sobran riesgos como la sobreinformación, que derivan en interferencias en la interpretación de los mensajes.
Pero, ¿Qué pasa realmente con un mundo que ahora se rige por la tecnología y los medios? El hecho de vivir rodeados de información es un condicionante en la vida de todos, pero genera más impacto y riesgos en los jóvenes. Nuestra generación se ve expuesta a flujos de información que pueden ser abrumadores y traer consecuencias negativas al desarrollo del día a día, y más grave aún, al desarrollo y construcción de nuestras personalidades.
De todas formas, no todo son malas noticias. Los medios y la tecnología dan lugar a numerosas cosas buenas, facilitando trabajos y actividades cotidianas.
Se destaca el lugar que brindan estas plataformas, redes sociales principalmente, en el cual los jóvenes podemos dejar ver nuestras posturas, pensamientos e ideas sobre diversos temas. Comúnmente asociamos este espacio de expresión a lo político o económico, temáticas sobre las cuales no es usual encontrar opiniones de adolescentes en los medios, ya que desde los mismos suelen considerarse temas del “mundo adulto”. Este mundo se integra por ciudadanos maduros, encargados del control e integración de los “jóvenes inmaduros”, que quedan excluidos de espacios de opinión, reflexión, e intercambio. La delincuencia juvenil, el consumo de drogas y los problemas de conducta en los colegios son algunas de las cuestiones en que los adolescentes aparecen asociados a este último estereotipo.
En conclusión, proponemos reflexionar sobre que, como parte de la sociedad, los jóvenes tenemos una voz con igual importancia que cualquier otro integrante de la misma, siendo fundamentales espacios en los que podamos participar y dar nuestras opiniones.
Y, dejando de lado los aspectos negativos de la era tecnológica en la que nos vemos inmersos, en ella encontramos herramientas útiles y prácticas, que pueden ser usadas no solo para el beneficio personal e individual, sino también colectivo.
Por Guadalupe Lovey. Instituto Educativo Nuevo Milenio.